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Cómo Organizar un Viaje al Valle del Mosela

Publicado
25/07/2024
 Situado en el suroeste de Alemania, el valle que forma a su paso el río Mosela se ha hecho últimamente bastante famoso sobre todo gracias a las redes sociales. Y no es para menos, y es que esta zona alemana, famosa por sus vinos, salpicada de pueblos con mucho encanto y paisajes de lo más fotogénicos, consigue enamorar a todo viajero que lo visita. Si estás leyendo este artículo es porque tú también sabes de los encantos de esta zona y te estás animando a visitarla. Pues decirte que ¡estas de suerte!, porque te vamos a dar toda la información necesaria para organizar un viaje al Valle del Mosela por tu cuenta.

Cómo llegar
 El Valle del Mosela en realidad es una zona que abarca varios países como son Francia, Alemania, Luxemburgo y Bélgica, pero es quizás la parte alemana la más famosa y pintoresca de todas ellas, y es a la que vamos a dedicar nuestro viaje.
Para llegar hasta aquí desde España lo más rápido y cómodo es en avión, y para ello tenemos varios aeropuertos como opción;

- Aeropuerto Frankfurt Hann que es la primera opción a barajar ya que es el aeropuerto más cercano, a unos 40 km de distancia de Cochem, uno de los pueblos más famosos del Valle del Mosela. Nosotros para nuestro viaje de julio descartamos este aeropuerto porque los precios eran elevados para nuestras fechas.

- Aeropuerto de Frankfurt (no confundir con el anterior) que se encuentra a unos 150 km de la zona del Mosela.

-Aeropuerto de Luxemburgo, también es una opción ya que se encuentra a unos 130 km de uno de los extremos del inicio de la ruta por el Valle del Mosela.

-Aeropuerto de Dusseldorf, el que nosotros elegimos por encontrarlo bastante económico para ser en plena temporada alta de verano. Este aeropuerto se encuentra a 150 kms. Volamos desde Málaga con Eurowings en vuelo directo por unos 400€ tres personas.

-Aeropuerto de Colonia, a 115km de Cochem.

Cuándo ir
 El Valle del Mosela es un destino en el que cada estación tiene su encanto;

* Verano, es la opción que nosotros elegimos, realizando nuestro viaje a principios de julio, donde los días son muy largos y la temperatura osciló entre 20-25 grados, bastante agradable, aunque nos llovió en varios días.

*Invierno, siendo la época navideña muy especial en el Valle del Mosela, ya que los pueblos de esta zona alemana se engalanan para estas fechas, siendo sus mercadillos navideños muy famosos en la zona.

*Primavera/otoño, son dos estaciones donde los colores del Valle del Mosela crean unos paisajes de lo más bonitos, que merecen una visita.

Qué ver
 Una de las cosas más complicadas a la hora de organizar un viaje, al menos para nosotros, es decidir el itinerario. Después de nuestra experiencia pasando unos días en el Valle del Mosela, te vamos a contar algunos de los lugares más famosos de esta zona.
 En la foto anterior (pincha para ampliarla) os mostramos el río Mosela salpicado de pueblos, y en ambos extremos, dos ciudades por las que se puede empezar y acabar el recorrido en cualquiera de sus sentidos, Coblenza (Koblenz) y Tréveris (Trier). Para ayudaros a hacer el itinerario os vamos a contar cuales son los puntos más famosos de la ruta y los más visitados.

-Coblenza, ciudad que nos puede servir de puerta de entrada o salida, depende en el sentido que realicemos el recorrido, para nuestra visita al Valle del Mosela. Se trata de una de las ciudades más antiguas de Alemania donde confluyen los ríos Rin y Mosela. Por lo tanto, una de las cosas que hacer aquí, es pasear por sus calles llenas de historia.

-Cochem, para nosotros el pueblo con la panorámica más bonita de todo el Valle del Mosela, y es que desde la otra orilla del río, las vistas son de esas que enamoran.
 Se trata de un pueblo que se puede recorrer en medio día, donde abundan los viñedos, y donde visitaremos su antigua fortaleza, situada en lo más alto de una colina.

-Burg Eltz, un castillo de lo más instagrameable que se sitúa a unos 20 min de Cochem.
 Este castillo, que siempre ha pertenecido a la misma familia, ha sobrevivido intacto a todas las guerras. Además de impresionar el castillo en sí, el entorno, rodeado de bosque, es espectacular.

-Beilstein, un pequeño pueblo que sorprende a todo el que lo visita, no sólo por recorrer sus bonitas calles y ver sus casas de entramado de madera del siglo XVI, también por su ubicación, situado entre colinas y a orillas del río.
 Este pueblo vinícola se ve en poco tiempo, pero es un destino para disfrutarlo, hacer una parada y comer con bonitas vistas, pasear y enamorarse del entorno.

-Puente Colgante de Geierlay, es un puente inaugurado en 2015, que se levanta a unos 100 metros del suelo, siendo el segundo puente colgante de cuerda más largo de Alemania, que une los pueblos de Mörsdorf y Sosberg.
 Cruzarlo es toda una experiencia para aquellos que no le tienen miedo a las alturas.

-Bernkastel-Kues, que presume por tener el título de ser el pueblo más bonito del Valle del Mosela.
 Bernkastel-Kues es la unión de dos pueblos, Bernkastel y Kues, que se encuentran separados por un río y a la vez unidos por un puente. De los dos, el que se suele visitar por ser de lo más pintoresco es Bernkastel, con un centro histórico sacado de un cuento de Navidad.

-Meandro de Bremm, situado en el pueblo de Bremm, donde el río Mosela hace una curva de casi 360° creando un paisaje único.
 Para ver este lugar, hay que hacer un pequeño recorrido cuesta arriba a pie, no muy exigente, para tener una panorámica del lugar.

-Zell es un pueblo rodeado de viñedos y bodegas famoso por sus vinos, siendo su especialidad el vino Zeller Schwarzekatz (gato negro).
 En su calle principal se encuentra una gran cantidad de comercios que ofrecen degustaciones y donde podemos hacernos con unas botellas. Nosotros aquí compramos varios vinos para traernos a casa, pero con respecto a valorar la belleza del pueblo, puede que fuera uno de los que menos nos gustó.

-Tréveris, es la ciudad donde acaba o comienza, según como realicemos el recorrido, la ruta por el Valle del Mosela. Esta ciudad, fundada por los romanos, guarda varios monumentos de esta época bastante bien conservados como un puente de piedra, un anfiteatro, baños romanos, y el más popular de todos, la Porta Nigra.

 Como en todos los viajes que realizamos, poco a poco iremos publicando nuestro diario de viaje con mucha más información de cada destino y contaremos nuestra experiencia.

Cuánto tiempo para visitar el Valle del Mosela
 Todos los puntos de los que hemos hablado en el apartado anterior teníamos planeado verlos en unos tres días y medio, teniendo en cuenta que en julio los días son muy largos. El problema es que, a pesar de ser pleno verano, nos pillaron días de bastante lluvia, por lo que tuvimos que sacrificar algunos puntos, de esta manera nos faltó por visitar Coblenza y Tréveris, y nos dedicamos a los pueblos más pequeños y fáciles de visitar. Para mí, unos cuatro días es la estancia ideal para disfrutar tranquilamente del Valle del Mosela.

Cómo moverse
 La mejor manera de recorrer los puntos más turísticos del Valle del Mosela es en coche. Nosotros alquilamos uno en el aeropuerto de Dussendorf con Rentalcars que siempre nos da muy buenos resultados.

 Los pueblos están cerca unos de otros, a una distancia en coche de media de unos 30/40 min, y las carreteras son cómodas de recorrer.

Dónde alojarnos
 En el Valle del Mosela encontramos alojamientos con mucho encanto. Para realizar el recorrido podemos hacer base en uno de los pueblos y de ahí irnos moviendo, pero para no andar haciendo y deshaciendo kilómetros, nosotros recomendaríamos al menos pernoctar en dos puntos estratégicos.

 -Nosotros la primera noche la hicimos en Cochem, en el Hotel Zehnthof, un hotel ubicado en la orilla del río contraria al pueblo, pero desde el que se llegaba al centro en 5 min a pie. Lo mejor es que nos dieron una tarjeta para poder aparcar y no nos tuvimos que preocupar del coche. Las habitaciones muy amplias y con vistas al castillo.
 - Las dos noches siguientes nos alojamos en las afueras del precioso pueblo Bernkastel-Kues, con aparcamiento gratuito. Este hotel nos pareció una maravilla. Las habitaciones enormes, las zonas comunes preciosas, y el desayuno una maravilla. El hotel Wein-und Landhaus S A Prüm es de esos lugares del que no te quieres ir.
 El Valle del Mosela es un lugar que nos ha encantado, tanto, que nos gustaría volver a visitar pronto, quizás en Navidad.


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