Publicado
24/11/2018
24/11/2018
Era nuestro segundo y último día de recorrido por la comarca de Guadix, y para hoy teníamos en la agenda una ruta por la Dehesa del Camarate en Lugros, o también conocido como el Bosque Encantado. Con una longitud de unos 13 kilómetros en total, se trata de una ruta muy famosa en la provincia de Granada, sobre todo en los meses de Octubre y Noviembre, cuando con la llegada del otoño, los árboles se tornan ocres y amarillos creando un paisaje muy bonito, todo ello rodeado por las cumbres de Sierra Nevada.
Antes del Recorrido
Como os dijimos anteriormente, durante el otoño se trata de una ruta muy popular, tanto, que había fines de semana que se daban cita en el Bosque Encantado miles de senderistas, visitantes y ciclistas. Por ello se ha tenido que proceder a limitar el acceso durante esta época del año para así proteger el entorno.
Solo podrán acceder al Bosque Encantado 575 personas al día y es necesario realizar reserva. Esta reserva se realiza mediante la web www.inscribirme.com, donde hay un apartado con el nombre de Dehesa del Camarate donde, de forma gratuita, podremos reservar de forma individual nuestro pase, es decir, que tendremos que hacer una reserva para cada miembro del grupo.
¡No os olvidéis de llevárosla porque os aseguro que sin reserva no os dejaran pasar!
Solo podrán acceder al Bosque Encantado 575 personas al día y es necesario realizar reserva. Esta reserva se realiza mediante la web www.inscribirme.com, donde hay un apartado con el nombre de Dehesa del Camarate donde, de forma gratuita, podremos reservar de forma individual nuestro pase, es decir, que tendremos que hacer una reserva para cada miembro del grupo.
¡No os olvidéis de llevárosla porque os aseguro que sin reserva no os dejaran pasar!
Puede que la normativa de acceso al Bosque Encantado haya sufrido variaciones, por lo que os recomendamos antes de vuestra visita poneros en contacto con el ayuntamiento de Lugros para recibir toda la información de forma actualizada. |
Cómo Llegar al Bosque Encantado
Según habíamos leído, la forma de llegar a la Dehesa del Camarate era aparcando el coche en Lugros y desde la plaza principal del pueblo tomar una lanzadera que te lleva al inicio de la ruta. Pero esa información era de 2017.
Fuimos hasta Lugros donde preguntamos y los vecinos nos comentaron que este año no funcionaba de igual forma la visita al Bosque Encantado, ya que, según nos dijeron, el pueblo es muy pequeño y se llenaba de coches que molestaban. Así que os vamos a contar cómo llegar;
Antes de la entrada a la localidad de Lugros nos encontramos con un desvío no señalizado hacia la derecha, donde vemos unas naves, seguimos el camino hasta donde vemos una gran explanada para aparcar los coches y una verja custodiada con dos ciervos. Desde este punto tenemos dos opciones;
* Tomar un minibus de la Junta de Andalucía que nos cubre 4.1 kilómetro de la ruta, a un precio de 3€ por trayecto/persona y que funciona de 8:00-18:00h. (2018)
*Empezar en este punto la ruta a pie, que serían los 13 kilómetros o hasta que el cuerpo aguante.
Nosotros optamos por tomar el autobús, aunque nos pareció un poco caro, al ir con mi peque decidimos que la ruta completa era mucho para ella.
Recorrido por el Bosque Encantado
Después de recorrer los aproximadamente cuatro kilómetros con el bus por una pista forestal, llegamos a una cancela donde comienza nuestra ruta a pie por el Bosque Encantado, y donde nos pedirán el papel con la reserva.
Tras pasar por la puerta lateral de la cancela, ya nos encontramos con el río y un paisaje muy diferente al que habíamos traído. El bosque se cierra, el suelo lo vemos llenísimo de hojas, y seguiremos por un camino empedrado y bastante húmedo.
A pocos pasos de la entrada damos a parar a una antigua capilla abandonada, que parece sacada de una novela de misterio, incluso si nos asomamos veremos una pequeña Virgen. Puede que os toque esperar para realizar vuestra foto ya que todos los caminantes se quieren llevar un recuerdo de este lugar. Nuestro consejo es que la hagáis a la vuelta, encontraréis el lugar más tranquilo y la luz es mejor ya que por la mañana el sol llega a molestar un poco.
Tras pasar por la puerta lateral de la cancela, ya nos encontramos con el río y un paisaje muy diferente al que habíamos traído. El bosque se cierra, el suelo lo vemos llenísimo de hojas, y seguiremos por un camino empedrado y bastante húmedo.
A pocos pasos de la entrada damos a parar a una antigua capilla abandonada, que parece sacada de una novela de misterio, incluso si nos asomamos veremos una pequeña Virgen. Puede que os toque esperar para realizar vuestra foto ya que todos los caminantes se quieren llevar un recuerdo de este lugar. Nuestro consejo es que la hagáis a la vuelta, encontraréis el lugar más tranquilo y la luz es mejor ya que por la mañana el sol llega a molestar un poco.
A pocos pasos nos encontramos la dehesa que le da el nombre a la ruta, que si subís un poco por las escaleras podréis ver vacas en su interior.
Seguimos el camino empedrado que se convierte en subida constante, teniendo durante la ruta que salvar 400 metros de desnivel, lo bueno es que al poco tiempo ya el camino no es tan húmedo y empieza a dar el sol.
Habíamos leído que la ruta la catalogaban como fácil, pero nosotros por la subida y el desnivel la catalogaríamos como dificultad media, porque si los niños no están acostumbrados a andar les puede costar un poco.
Durante el camino escucharemos el ruido de saltos de agua, pasaremos por algún que otro puente de piedra y veremos las cumbres de Sierra Nevada llenas de nieve sobre nuestras cabezas. Nosotros llegamos hasta el punto que veis en la foto, con este paisaje tan bonito nos deleitamos largo rato antes de comenzar el descenso.
Conclusión
Habíamos visto fotos del Bosque Encantado en otoño donde los árboles tienen unos colores muy bonitos, en nuestro caso no fue así, los árboles ya tenían aspecto de invierno, estaban totalmente sin hojas a 1 de Diciembre, así que si queréis ver las tonalidades del otoño serían mejor los meses de octubre o primeros de noviembre.
La primera parte de la ruta es bastante húmeda, por lo que hay que ir con calzado adecuado.
Para los niños más pequeños, como dijimos anteriormente, la ruta puede resultar un poco dura. Muchas familias optaban por caminar la pista forestal (que nosotros hicimos en bus), y llegar hasta la ermita abandonada donde pasan el día.
Ya solo falta preparar las mochilas, ¡venga! ¡que nos vamos al Bosque encantado!.
La primera parte de la ruta es bastante húmeda, por lo que hay que ir con calzado adecuado.
Para los niños más pequeños, como dijimos anteriormente, la ruta puede resultar un poco dura. Muchas familias optaban por caminar la pista forestal (que nosotros hicimos en bus), y llegar hasta la ermita abandonada donde pasan el día.
Ya solo falta preparar las mochilas, ¡venga! ¡que nos vamos al Bosque encantado!.
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