Publicado
5/03/2018
5/03/2018
El metro nos dejó a la altura de la casa Dakota, uno de los edificios más caros de la ciudad, donde vive Yoko Ono, la viuda de John Lennon, al cual asesinaron a pocos metros del portal. A esta altura entramos en Central Park y lo primero que nos encontramos es el memorial de John Lennon.
El parque en esta época del año está un poco gris, ya que los árboles están sin hojas pero no deja de tener su encanto con la gente en bici, corriendo, coches de caballos y pistas de patinaje sobre hielo.
Nos hicimos las fotos correspondientes en la fontain, la fuente de Central Park que ha salido en tantas películas, hasta llegar al monumento de Alicia en el País de las Maravillas, donde había niños trepando por todos sus rincones. Milagrosamente un instante se bajaron y pudimos sacar una foto sin nadie, pero duró segundos.
Como en internet habíamos consultado que el anochecer se produciría sobre las 18 h, y eran las 17 h, decidimos tomar el metro para ir con tiempo al Top Of The Rock para coger un buen sitio y menos mal, porque ahora la cola de espera no tenía nada que ver con la de esta mañana, tardamos al menos 35 min en pasar el control de seguridad y subir, había muchísima gente y como empezaba a hacer frío nos quedamos en la planta de las cristaleras mientras mi marido se subió al mirador al aire libre para que las fotos salieran mejor, tened en cuenta que no se permite subir con trípode por las normas de seguridad. El atardecer es alucinante, se ve caer el sol y las luces van inundando la ciudad, el cielo va tomando distintos matices mientras se esconde.
Solo por ver estas imagenes ya merece la pena visitar Nueva York.
Recomiendo llegar con tiempo porque a esa hora van muchísimas personas. Salimos sobre las 19h y nos fuimos directos nuevamente a Times Square ya que las veces que hemos pasado por aquí no hemos entrado en ninguna de sus tiendas a excepción del día de llegada a la tienda Disney. Esta vez visitamos la tienda de m&m de très plantas, donde hay mil cosas de mechardaisin de la marca. Justo al lado de la tienda de m&m está el Mundo de Chocolate de Hershey’s, la fachada de la tienda es preciosa y allí compramos unas cajitas de bombones como souvenirs muy bonitas con imágenes de Nueva York y bien de precio.
Times Square estaba abarrotado de gente dirigiéndose a cenar, a los teatros o simplemente paseando. Nosotros ya nos dirijimos a comer algo y esta vez elegimos la franquicia pizzas 99 cts. Son locales pequeños que no tienen lugar para sentarse, las porciones valen 99 centimos y te las preparan para llevar. Son porciones grandes y es la típica pizza americana. La elección fue porque estaba muy cerca del hotel, en la octava avenida, y la pizza es algo que nos gusta a todos, así que compramos las porciones y nos las comimos en el hotel.
Como en internet habíamos consultado que el anochecer se produciría sobre las 18 h, y eran las 17 h, decidimos tomar el metro para ir con tiempo al Top Of The Rock para coger un buen sitio y menos mal, porque ahora la cola de espera no tenía nada que ver con la de esta mañana, tardamos al menos 35 min en pasar el control de seguridad y subir, había muchísima gente y como empezaba a hacer frío nos quedamos en la planta de las cristaleras mientras mi marido se subió al mirador al aire libre para que las fotos salieran mejor, tened en cuenta que no se permite subir con trípode por las normas de seguridad. El atardecer es alucinante, se ve caer el sol y las luces van inundando la ciudad, el cielo va tomando distintos matices mientras se esconde.
Recomiendo llegar con tiempo porque a esa hora van muchísimas personas. Salimos sobre las 19h y nos fuimos directos nuevamente a Times Square ya que las veces que hemos pasado por aquí no hemos entrado en ninguna de sus tiendas a excepción del día de llegada a la tienda Disney. Esta vez visitamos la tienda de m&m de très plantas, donde hay mil cosas de mechardaisin de la marca. Justo al lado de la tienda de m&m está el Mundo de Chocolate de Hershey’s, la fachada de la tienda es preciosa y allí compramos unas cajitas de bombones como souvenirs muy bonitas con imágenes de Nueva York y bien de precio.
Times Square estaba abarrotado de gente dirigiéndose a cenar, a los teatros o simplemente paseando. Nosotros ya nos dirijimos a comer algo y esta vez elegimos la franquicia pizzas 99 cts. Son locales pequeños que no tienen lugar para sentarse, las porciones valen 99 centimos y te las preparan para llevar. Son porciones grandes y es la típica pizza americana. La elección fue porque estaba muy cerca del hotel, en la octava avenida, y la pizza es algo que nos gusta a todos, así que compramos las porciones y nos las comimos en el hotel.
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