Publicado
26/07/2023
26/07/2023
Aprovechando que ya anochece más tarde, vamos a dedicar la tarde a conocer tres de los pueblos más famosos y visitados de Holanda como son Edam, Volendam y Marken. Estos tres pueblos son muy pequeñitos y están bastante próximos entre sí, por lo que son muy cómodos de visitar. También suele ser una excursión muy popular para realizar desde Ámsterdam para los que se encuentran visitando la capital, ya que se ubican a poco más de 20 kms de distancia.
Marken
Nosotros vamos a comenzar por visitar Marken, un pequeño pueblo pesquero ubicado en un islote unido a tierra por una carretera que va sobre las aguas del lago Ijssel, situado a 20 kms al noroeste de Ámsterdam.
Marken siempre fue una isla que ha estado en continua lucha con el agua. Fue en 1957 que se construyó un dique que permitió unir Marken con el resto de Holanda a través de una carretera, siendo en ese momento considerada como península.
Marken tiene toda la esencia de años atrás con sus casas típicas, conservando el encanto de pueblo pesquero, siendo uno de los puntos claves su puerto donde ver las puestas de sol, y sus coquetas calles que parecen sacadas de una postal.
Al llegar, en la entrada del pueblo encontramos un gran aparcamiento donde dejamos el coche de forma gratuita. Desde aquí el recorrido lo realizaremos a pie perdiendonos por las calles de Marken.
A pocos metros del aparcamiento nos encontramos con una especie de fábrica de zuecos y museo, donde se puede ver cómo realizan los famosos zuecos de madera.
Marken siempre fue una isla que ha estado en continua lucha con el agua. Fue en 1957 que se construyó un dique que permitió unir Marken con el resto de Holanda a través de una carretera, siendo en ese momento considerada como península.
Marken tiene toda la esencia de años atrás con sus casas típicas, conservando el encanto de pueblo pesquero, siendo uno de los puntos claves su puerto donde ver las puestas de sol, y sus coquetas calles que parecen sacadas de una postal.
Al llegar, en la entrada del pueblo encontramos un gran aparcamiento donde dejamos el coche de forma gratuita. Desde aquí el recorrido lo realizaremos a pie perdiendonos por las calles de Marken.
A pocos metros del aparcamiento nos encontramos con una especie de fábrica de zuecos y museo, donde se puede ver cómo realizan los famosos zuecos de madera.
Nosotros, como ya habíamos visto este proceso en la fábrica de zuecos de Zaanse Schans, no nos detuvimos demasiado en el interior. Lo mejor para conocer Marken es caminar sin rumbo fijo, disfrutando de cada rincón, de sus canales y sus calles hasta llegar al puerto.
A pesar de ser Semana Santa encontramos este puerto bastante solitario. La mayoría de los restaurantes y puestos estaban cerrados y había poco ambiente. Suponemos que en verano la cosa cambia y el puerto de Marken es un lugar de lo más animado.
Dimos un paseo viendo las embarcaciones y el lugar donde llega el ferry procedente de Volendam, y es que estos dos pueblos se pueden visitar usando este medio de transporte.
Las casitas que se encuentran cerca del puerto parecen sacadas de un cuento, haciendo de Marken un lugar idílico.
Edam
Tras el paseo por Marken nos dirigimos a Edam, dejando para último el pueblo de Volendam porque queremos terminar el día cenando en un restaurante de Volendam que nos han recomendado.
Edam se encuentra a unos 17 km de Marken, por lo que en unos 20 min estamos aparcando en una de sus calles cerca del centro. Según nos han dicho, Edam es un pueblo bastante pequeñito y tranquilo pero con mucho encanto.
Comenzamos a recorrer Edam a pie y empezamos a encontramos calles a nuestro paso de lo más auténticas, con las típicas casas holandesas que tanto nos gustan.
Edam se encuentra a unos 17 km de Marken, por lo que en unos 20 min estamos aparcando en una de sus calles cerca del centro. Según nos han dicho, Edam es un pueblo bastante pequeñito y tranquilo pero con mucho encanto.
Comenzamos a recorrer Edam a pie y empezamos a encontramos calles a nuestro paso de lo más auténticas, con las típicas casas holandesas que tanto nos gustan.
Llegamos hasta Kwakelbrug, uno de los puentes más antiguos de Edam desde donde se tienen vistas a los astilleros, una de las imágenes más bonitas del pueblo.
Para los amantes del queso deciros que en Edam, en una tradicional casa holandesa del siglo XVIII, se encuentra la quesería Kaasspeciaalzaak Henri Willog, una de las marcas más prestigiosas de Países Bajos. Nosotros la encontramos cerrada, pero según nos dijeron, en su interior se puede visitar el Museo del Queso, conocer la historia de Henri Willog y probar alguno de los quesos de la marca.
Muy cerca de la quesería se encuentra la Plaza Damplein, la que es la plaza principal de Edam. Aquí se encuentran edificios tan importantes como el Ayuntamiento o la antigua oficina de correos.
En uno de los extremos de esta plaza hay una antigua casa, del 1540, que se ha convertido en museo. Esta casa se encuentra totalmente decorada como era originalmente. Pero dada la hora, también la encontramos cerrada.
Otra plaza bastante conocida aquí en Edam es la Plaza Nieuwenhuizenplein. En esta plaza es donde se realiza cada miércoles en verano, durante los meses de julio y agosto, el tradicional mercado del queso.
En este mercado se realiza una recreación de como se hacía en la Edad Media. Los quesos son transportados en coches de caballos o en barcas por los canales, y cuando llegan los expertos lo pesan y determinan el precio. En una de las esquinas de la plaza vemos una figura donde se representa como trasladan estos quesos de un lugar a otro.
Como nuestro viaje no coincide con los meses de mercado no vamos a poder ver esta actividad en Edam. Pero no nos vamos a quedar sin ver uno de estos tradicionales mercados, y es que dentro de unos días visitaremos Gouda, y allí sí que viviremos esta experiencia.
Seguimos paseando y llegamos hasta una zona de canales que recorren Edam, como el canal de Nieuwvaartje, uno de los más vistosos.
Seguimos paseando y llegamos hasta una zona de canales que recorren Edam, como el canal de Nieuwvaartje, uno de los más vistosos.
Ya de vuelta al coche, callejeando nos topamos con una gran torre de 16 metros de altitud conocida como Speeltoren. Esta torre del siglo XV pertenecía a una antigua iglesia que fue destruida, y hoy día se ha conservado como todo un símbolo de la ciudad.
Ahora sí nos vamos hasta el último pueblo que nos queda y donde vamos a terminar la jornada. Nos dirigimos a Volendam.
Ahora sí nos vamos hasta el último pueblo que nos queda y donde vamos a terminar la jornada. Nos dirigimos a Volendam.
Volendam
Llegamos al tercero de los pueblos de nuestra ruta de esta tarde. Volendam es un pueblo de pescadores y es considerado uno de los más bonitos de Holanda y de los más visitados, y eso se aprecia en sus calles, casas típicas y en su pintoresco puerto.
Lo mejor para conocer Volendam es perderse por sus calles, asomarse a su puerto, y visitar algunas de sus originales tiendas que encontramos a nuestro paso. Pero además, hay algunos puntos que no nos podemos perder y que llevamos apuntados en nuestra hoja de ruta. Aparcamos el coche cerca del centro y comenzamos nuestro itinerario.
Lo mejor para conocer Volendam es perderse por sus calles, asomarse a su puerto, y visitar algunas de sus originales tiendas que encontramos a nuestro paso. Pero además, hay algunos puntos que no nos podemos perder y que llevamos apuntados en nuestra hoja de ruta. Aparcamos el coche cerca del centro y comenzamos nuestro itinerario.
Lo primero que nos encontramos a nuestro paso es un museo, el Volendam Museum, donde se puede conocer la historia del pueblo. Nosotros no lo podemos visitar porque cierra a las 17h y ya se nos ha hecho tarde.
Paseando nos encontramos alguno de sus bonitos canales, como el de Edammerweg y Schippersgracht rodeados de casitas homogéneas que hacen que la estampa sea muy bonita. El problema es que comienza a llover.
Seguimos Callejeando y callejeando, con el chubasquero puesto, viendo casas antiguas típicas holandesas que parecen sacadas de una postal. Algunas de estas calles como Sint-Vicentiuskerk, donde podemos admirar una iglesia católica del año 1860.
Ahora nos vamos a la zona del puerto, la zona más animada, bonita y visitada de Volendam.
Aquí, además de ver los barcos atracados y disfrutar del ambiente, se pueden visitar tiendas muy curiosas donde no vas a poder evitar entrar. La mayoría venden productos típicos holandeses como zuecos, trajes típicos o quesos. Pero hay una tienda que llama bastante la atención y es Woltje's Backerij, donde venden las famosas galletas holandesas Stroopwafels. Además esta tienda es ideal si hay que comprar algún regalito ya que hay cajas de galletas monísimas.
Cerca del puerto hay otro lugar que no nos podemos perder y es la Volendam Cheese Factory. Se trata de una gran tienda de quesos donde comprar típico queso holandés, y como en todos los lugares holandeses que estamos visitando donde venden este producto, se puede degustar la inmensa mayoría, por lo que además de comprar varios quesos para llevar, nos pegamos un gran atracón.
Además de la tienda hay una pequeña exposición relacionada con el mundo del queso. También vemos que dan charlas en un piso inferior sobre la elaboración del queso, pero para poder asistir a estas charlas hay pagar entrada.
Ya está anocheciendo y nos dirigimos nuevamente al puerto para buscar un lugar para cenar. Elegimos el restaurante The Lunch, un local con una decoración muy original, típica marinera, donde comemos unos platos combinados de pescado. Un lugar muy recomendable.
Ya está anocheciendo y nos dirigimos nuevamente al puerto para buscar un lugar para cenar. Elegimos el restaurante The Lunch, un local con una decoración muy original, típica marinera, donde comemos unos platos combinados de pescado. Un lugar muy recomendable.
Ya con el estómago lleno nos vamos a nuestro alojamiento que toca descansar. Hoy ha sido un día muy largo y mañana nos quedan más lugares bonitos que visitar de Holanda.
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